Los libros dicen que todo buen ataque nace de una buena defensa, y Las Leonas lo llevan a la práctica con mucho éxito. Si bien históricamente el seleccionado argentino se caracterizó por sólidas líneas defensivas, el ciclo de Carlos Retegui está haciendo de la defensa un culto, y la valla menos vencida en el Mundial de Rosario 2010 es una fiel muestra de la eficiencia de la última línea albiceleste.
Barrionuevo, D'Elía y Maccari. Retegui apuesta a un sistema con tres defensoras
Con un pasado marcado por la elección de una línea de cuatro en el fondo, el Chapa Retegui ha dejado en claro que la línea de tres es su esquema táctico predilecto. En el Mundial de Rosario, que tuvo a Las Leonas campeonas, Argentina recibió tan sólo tres goles en contra y tuvo la valla menos vencida del torneo. Por ese entonces Retegui variaba, según el rival, entre tres y cuatro defensoras, teniendo a Claudia Burkart, Mariana Rossi, Silvina D´elia y Noel Barrionuevo defendiendo el fondo albiceleste. Hoy, con el retiro de Burkart y Rossi, Giselle Kañevsky, Victoria Zuloaga y Sofía Maccari aparecen como las candidatas a ocupar los puestos vacantes. De hecho, en el partido de hoy frente a Inglaterra, Sofía Maccari hizo su debut en el Champions Trophy ingresando como titular junto a D»Elía y Barrionuevo. La jugadora nacida en San Fernando desempeñó un gran trabajo, colaborando así para que Argentina no recibiera goles y no tuviera córners cortos en contra.
Las Leonas demostraron solidez y mucha dinámica en el fondo, apoyadas por las aguerridas mediocampistas, siempre dispuestas a colaborar en defensa. Es que la explosión física que le dio a las jugadoras la era Retegui, les permite permanentes rotaciones y cambios en el sistema táctico, entonces a la hora de defender, tanto volantes como delanteras, llegan para relevarse y dar una mano en el fondo. Esto sin contar la enorme tarea de Belén Succi, pieza fundamental para el equipo campeón del mundo y una de las mejores arqueras de mundo. La portera del CASI brinda seguridad a una defensa que es un punto clave de este equipo extremadamente ofensivo y vertiginoso, que genera innumerables situaciones de gol por partido, gracias al talento de sus volantes y delanteras, pero sin descuidar el arco propio. Resultado de muchas horas de entrenamiento y sobretodo de un enorme amor propio, Argentina es hoy, uno de los equipos que mejor defiende en el mundo.
